CBJA ALCALÁ
COOLTURA DE CLUB
Orgullo de Cooltura de Club: la fiesta del basket de la Mujer
Ambientazo, fiesta, homenaje a la Mujer, y monumento al Baloncesto femenino senior, a nuestras flamantes y emergentes Motomamis, todo un ejemplo, como a las Viejas Glorias de Velilla, las invitadas de gala para esta alfombra morada del Juande, que no necesitó de gala anterior ni posterior, pues lo dejaron todo para la pista, y el juego como el marcador, fueron una auténtica pasada para un pabellón entregado.
Esto es sin duda un antes y un después en el club, en su sección de veteranas, pues estas 17 pioneras, con Fernando Bermejo y Diego Calabuig en la sala de máquinas, ya tienen en su agenda una visita a Segovia, como primer torneo fuera de nuestra Comunidad.
Comentar que el pabellón debió estar a reventar, porque seguimos sin ser conscientes de que todo es entre tod@s, del momento que vivimos, pero no lo estuvo, aunque registró una buena entrada, y mejor ambiente, que ya desde el parking se intuía, se presentía partido grande, noche mágica, un volumen de la música más alto...
No podemos dejar pasar que todo estaba preparado, los equipos calentaban con tiempo suficiente, los niños del club respondían como siempre, sobre todo los que no podían faltar para ver el partidazo de sus madres, muchos y sobre todo muchas, como la presencia de varias personalidades, destacando Patricia Sánchez, Concejala de Igualdad. No pudo faltar, como siempre, Raúl Barrios, presidente de FunBal Alcalá.
Otras casi tan importantes como las protagonistas del encuentro, fueron el grupo de Cheerleading Rainbow, vigentes campeonas de España, que hicieron pasarlo en grande a la animada afición, además de colaborar en la presentación, tipo NBA, de las escuadras femeninas de la noche.
Destaquemos antes, que este excepcional grupo humano que tan bien nos representa, se lo está currando mucho, haga frío o llueva, entrenando casi a última hora y al aire libre, por no poder haber otra, sin pedir nada a cambio, sin hacer ruido, para luego demostrar lo importante que es hacer equipo con un 5º cuarto en el que se toman algo y charlan todas las semanas.
Fernando Bermejo hizo de speaker con maestría, para las mamás de Juande que lucían flamantes con su simpatía habitual, sus ya nuevas equipaciones personalizadas y sus cubres, siendo el morado, como no podía ser de otra manera, el color de la noche para ambos equipos, honor que las nuestras con camadería, cedieron al Velilla. Arbitrando la contienda estarían Agustín Curá y David Prieto, siempre dispuestos a colaborar en el club. Inmortalizando toda la noche a los mandos de su codiciada cámara estuvo Isidoro.
Pero la noche respiraba basket, y tras los increíbles saltos de las Cheerleaders de Rainbow, que esperamos que nos visiten mas a menudo, tocaba comenzar a botar el balón. En los primeros compases pesaba la responsabilidad, los nervios, y ahí el Velilla entró con mejor pie en el partido, y el Juande respondía con los buenos fundamentos de Ágnes, Noelia veía como se salia un bonito triple, no las visitantes que pegaron el primer estirón en el marcador.
Nerea, Alicia o Ángela, casi nada al mando, asentaban al equipo en sus primeras buenas jugadas, y Patricia cogió el testigo en la zona para imponer su ley, bien secundada por una combativa Roxana.
Susana nos hacía echar la vista atrás, a la chica para todo que tuvo el club, otro placer verla junto a Eva C, Eva M, Daniela, Mónica, Mari Cruz, Reyes, Paloma, María, Gudrun o Laura, 17 que forman un plantillón que no para de crecer y anuncia fichajes todos los meses, y que cuenta con una batería de pívots de altura. Todas lucharon y lo dieron todo, además lo parejo del marcador todo la primera parte le daba ese aliciente extra a la contienda.
La segunda parte, y en especial el último cuarto, iba a ser el despegue de las Motomamis, con Diego rotando su arsenal sobre el parqué. Patricia acabaría como MVP de una fiesta a la igualdad en el Deporte, en la vida, en la que se gana y se avanza, que nunca está todo hecho ni mucho menos. La noche terminó con cena de equipo improvisada, como mejor se acaba, con una sonrisa y el trabajo bien realizado, a parte de la guinda de la victoria.
Pueden estar contentas, pues le han puesto empeño y muchas ganas a un proyecto muy bonito, y con este orgullo de mamis y jugadoras, el relevo está garantizado, lo que pasa es que vienen desde atrás con mucha calidad y les quedan muchos años de competir por delante, pero este equipo tiene mimbres para esperar a otras generaciones y traspasar este legado tan bonito que han iniciado, de madres a hijas, de motos a mamis, un auténtico tesoro, como son ellas, las Motomamis.